DW - DEUTSCHE WELLE
Alemania 18.04.2009
SPD presenta programa electoral con giro a la izquierda
El Partido Socialdemócrata Alemán (SPD) despachó en Berlín un programa electoral para los comicios generales de septiembre, con el actual ministro del Exterior, Frank-Walter Steinmeier, como candidato a canciller.
El programa, acordado por unanimidad por el directorio del partido, da un giro hacia la izquierda, se centra en la política social y de apoyo a las familias de menores ingresos, y de aquellas que tengan muchos hijos. Apoya un aumento de las asignaciones familiares y también se exige que se instaure un sueldo mínimo generalizado y no sólo para algunos sectores laborales como en la actualidad.
En contrapartida, los socialdemócratas abogan por incrementar los impuestos a los sectores de ingresos elevados a fin de poder financiar amplios programas educativos. También proponen un nuevo impuesto a las transacciones bursátiles.
Elecciones en tiempos de crisis
Steinmeier sostuvo que la actual crisis financiera y económica "decantará claramente" las opciones electorales, porque los partidos conservadores subestiman las consecuencias sociales que acarreará la crisis. El programa del SPD, "hecho a la medida", es la respuesta correcta a la peor crisis económica en la posguerra, coincidieron los delegados a la sesión de la ejecutiva del SPD en Berlín.
Además, el programa pide la eliminación del servicio militar obligatorio y la formación de unas fuerzas armadas formada por voluntarios. Se exige también el retiro de todas las armas nucleares que Estados Unidos mantiene en el territorio nacional, y defiende la decisión de abandonar la energía nuclear.
Panorama electoral
Un congreso partidario, que se celebrará el 14 de junio en Berlín, deberá despachar oficialmente lo que el SPD llama su "Plan de Gobierno". Las elecciones generales están previstas para el 27 de septiembre.
Todos los sondeos confirman la tendencia de las últimas décadas y se prevé que en los comicios ningún partido obtendrá la mayoría absoluta. Por tanto, será necesaria la formación de un gobierno de alianzas, como el actual, en el que la canciller Angela Merkel gobierna con una coalición de su partido conservador Unión Cristianodemócrata (CDU), con la Socialdemocracia.
Para el próximo gobierno, Merkel priorizará una alianza de centroderecha con el partido Liberal, mientras que Steinmeier pugna por una alianza de centroizquierda con los ecologistas de Los Verdes, eventualmente con apoyo de los Liberales. Todos los partidos descartan una cooperación con el partido de La Izquierda, formado por socialistas y poscomunistas.
DPA
Alemania 18.04.2009
SPD presenta programa electoral con giro a la izquierda
El Partido Socialdemócrata Alemán (SPD) despachó en Berlín un programa electoral para los comicios generales de septiembre, con el actual ministro del Exterior, Frank-Walter Steinmeier, como candidato a canciller.
El programa, acordado por unanimidad por el directorio del partido, da un giro hacia la izquierda, se centra en la política social y de apoyo a las familias de menores ingresos, y de aquellas que tengan muchos hijos. Apoya un aumento de las asignaciones familiares y también se exige que se instaure un sueldo mínimo generalizado y no sólo para algunos sectores laborales como en la actualidad.
En contrapartida, los socialdemócratas abogan por incrementar los impuestos a los sectores de ingresos elevados a fin de poder financiar amplios programas educativos. También proponen un nuevo impuesto a las transacciones bursátiles.
Elecciones en tiempos de crisis
Steinmeier sostuvo que la actual crisis financiera y económica "decantará claramente" las opciones electorales, porque los partidos conservadores subestiman las consecuencias sociales que acarreará la crisis. El programa del SPD, "hecho a la medida", es la respuesta correcta a la peor crisis económica en la posguerra, coincidieron los delegados a la sesión de la ejecutiva del SPD en Berlín.
Además, el programa pide la eliminación del servicio militar obligatorio y la formación de unas fuerzas armadas formada por voluntarios. Se exige también el retiro de todas las armas nucleares que Estados Unidos mantiene en el territorio nacional, y defiende la decisión de abandonar la energía nuclear.
Panorama electoral
Un congreso partidario, que se celebrará el 14 de junio en Berlín, deberá despachar oficialmente lo que el SPD llama su "Plan de Gobierno". Las elecciones generales están previstas para el 27 de septiembre.
Todos los sondeos confirman la tendencia de las últimas décadas y se prevé que en los comicios ningún partido obtendrá la mayoría absoluta. Por tanto, será necesaria la formación de un gobierno de alianzas, como el actual, en el que la canciller Angela Merkel gobierna con una coalición de su partido conservador Unión Cristianodemócrata (CDU), con la Socialdemocracia.
Para el próximo gobierno, Merkel priorizará una alianza de centroderecha con el partido Liberal, mientras que Steinmeier pugna por una alianza de centroizquierda con los ecologistas de Los Verdes, eventualmente con apoyo de los Liberales. Todos los partidos descartan una cooperación con el partido de La Izquierda, formado por socialistas y poscomunistas.
DPA
EL MUNDO
Llamadme sólo Frank, Frank Steinmeier
CARLOS ÁLVARO ROLDÁN desde Berlín
15 de febrero de 2009.- A ningún avezado votante sorprende ya que en los carteles de las campañas electorales los candidatos de sus partidos rejuvenezcan un par de decenas de años o incluso reduzcan visiblemente las entradas capilares y, por supuesto, las arrugas. "¡Viva Photoshop!" parece haberse convertido en el grito de guerra de los asesores de imagen de los políticos.
Alemania, poco dada a veleidades espectaculares en el ámbito político, acaba de ponerse a la delantera en este arte de campaña de disfrazar la realidad. Y el culpable es la mano derecha de la canciller conservadora Angela Merkel en el Gobierno de gran coalición, el ministro de Exteriores socialdemócrata Frank-Walter Steinmeier. El mismo hombre que el próximo 29 de septiembre se tornará en su máximo enemigo en las enrevesadas elecciones federales.
Bien, pues después de muchos años de ser conocido públicamente como Frank-Walter Steinmeier, el candidato del Partido Socialdemócrata (SPD) se ha dejado convencer por sus asesores y ha eliminado su segundo nombre de pila de toda la publicidad electoral. "Nosotros con Frank", rezan escuetamente los carteles del partido conocidos hace unos días.
La prensa popular de derechas ha encontrado en la anécdota un filón para este fin de semana y el 'Bild' dedica casi una página a la sorpresiva 'boutade' del SPD, donde no faltan incluso declaraciones al respecto de la Unión Cristianodemócrata (CDU) de Merkel.
"Ohne Mitte fehlt dir was" (sin el medio -o el centro- te falta algo), recoge la edición dominical del diario atribuyéndolo a una feliz ocurrencia sin autor material de los conservadores. El lector español deberá entender que el SPD se define a sí mismo como 'Die Mitte' (el centro o el medio).
Frank-Walter Steinmeier, desde ahora sólo Frank. Afp
Lejos de amilanarse, el hasta hace poco ministro alemán con menos carisma del Ejecutivo, según la prensa, ha salido del paso quitando hierro al asunto. "En mi pasaporte pone Frank-Walter, pero mis amigos me llaman Frank. Y en cualquier caso creo que el país tiene otros problemas", sentencia.
Razón oficial del acortamiento nominal no existe hasta el momento, si acaso los distintos analistas aseguran de fuentes de la estrategia nacional socialdemócrata que los motivos son simples: es más "corto", "moderno" y "cercano". Además, según sus mismos comentarios, hasta hace apenas una semana el propio ministro contestaba a su teléfono como "Frank-Walter Steinmeier, ¿hola?" Ahora, subrayan, él mismo dice exclusivamente "Frank Steinmeier".
No hace mucho EL MUNDO indagaba en Berlín sobre las razones que convertían a Thorsten Schäfer-Gümbel, el derrotado candidato del SPD en las recientes elecciones del 'Land' (Estado) de Hesse, en el unánime "político más ridiculizado de la historia". Además de por las numerosas y divertidas combinaciones que permitía su nombre, un abogado explicaba que normalmente, y al contrario que en España, "los nombres compuestos en Alemania suenan un poco ridículos".
De cualquier manera, sea cual sea la explicación de la abreviatura, no parece que la “tormenta de ideas” patronímica en el SPD vaya a afectar a las urnas federales de septiembre. En la legislatura que ahora se agota, los socialdemócratas han sufrido una sangría inacabable en sus bases tradicionales, en gran parte por la dura reforma social conocida como Agenda 2010,y según la última encuesta conocida recibirían el 25% de votos. Muy lejos del 38,4% de 2005, cuando Merkel apenas ganó con el 40,08% y se vio obligada a una gran coalición con el SPD.
Para la cita electoral hay un claro favorito, la CDU de Merkel, con el 38% de intención de voto, que podrá pactar con su aliado natural, el fortalecido Partido Liberal (FDP), al que las encuestas dan entre el 13 y 18% de apoyos. Los Verdes y los ex comunistas de La Izquierda se repartirían cada uno el 10%.
CARLOS ÁLVARO ROLDÁN desde Berlín
15 de febrero de 2009.- A ningún avezado votante sorprende ya que en los carteles de las campañas electorales los candidatos de sus partidos rejuvenezcan un par de decenas de años o incluso reduzcan visiblemente las entradas capilares y, por supuesto, las arrugas. "¡Viva Photoshop!" parece haberse convertido en el grito de guerra de los asesores de imagen de los políticos.
Alemania, poco dada a veleidades espectaculares en el ámbito político, acaba de ponerse a la delantera en este arte de campaña de disfrazar la realidad. Y el culpable es la mano derecha de la canciller conservadora Angela Merkel en el Gobierno de gran coalición, el ministro de Exteriores socialdemócrata Frank-Walter Steinmeier. El mismo hombre que el próximo 29 de septiembre se tornará en su máximo enemigo en las enrevesadas elecciones federales.
Bien, pues después de muchos años de ser conocido públicamente como Frank-Walter Steinmeier, el candidato del Partido Socialdemócrata (SPD) se ha dejado convencer por sus asesores y ha eliminado su segundo nombre de pila de toda la publicidad electoral. "Nosotros con Frank", rezan escuetamente los carteles del partido conocidos hace unos días.
La prensa popular de derechas ha encontrado en la anécdota un filón para este fin de semana y el 'Bild' dedica casi una página a la sorpresiva 'boutade' del SPD, donde no faltan incluso declaraciones al respecto de la Unión Cristianodemócrata (CDU) de Merkel.
"Ohne Mitte fehlt dir was" (sin el medio -o el centro- te falta algo), recoge la edición dominical del diario atribuyéndolo a una feliz ocurrencia sin autor material de los conservadores. El lector español deberá entender que el SPD se define a sí mismo como 'Die Mitte' (el centro o el medio).
Frank-Walter Steinmeier, desde ahora sólo Frank. Afp
Lejos de amilanarse, el hasta hace poco ministro alemán con menos carisma del Ejecutivo, según la prensa, ha salido del paso quitando hierro al asunto. "En mi pasaporte pone Frank-Walter, pero mis amigos me llaman Frank. Y en cualquier caso creo que el país tiene otros problemas", sentencia.
Razón oficial del acortamiento nominal no existe hasta el momento, si acaso los distintos analistas aseguran de fuentes de la estrategia nacional socialdemócrata que los motivos son simples: es más "corto", "moderno" y "cercano". Además, según sus mismos comentarios, hasta hace apenas una semana el propio ministro contestaba a su teléfono como "Frank-Walter Steinmeier, ¿hola?" Ahora, subrayan, él mismo dice exclusivamente "Frank Steinmeier".
No hace mucho EL MUNDO indagaba en Berlín sobre las razones que convertían a Thorsten Schäfer-Gümbel, el derrotado candidato del SPD en las recientes elecciones del 'Land' (Estado) de Hesse, en el unánime "político más ridiculizado de la historia". Además de por las numerosas y divertidas combinaciones que permitía su nombre, un abogado explicaba que normalmente, y al contrario que en España, "los nombres compuestos en Alemania suenan un poco ridículos".
De cualquier manera, sea cual sea la explicación de la abreviatura, no parece que la “tormenta de ideas” patronímica en el SPD vaya a afectar a las urnas federales de septiembre. En la legislatura que ahora se agota, los socialdemócratas han sufrido una sangría inacabable en sus bases tradicionales, en gran parte por la dura reforma social conocida como Agenda 2010,y según la última encuesta conocida recibirían el 25% de votos. Muy lejos del 38,4% de 2005, cuando Merkel apenas ganó con el 40,08% y se vio obligada a una gran coalición con el SPD.
Para la cita electoral hay un claro favorito, la CDU de Merkel, con el 38% de intención de voto, que podrá pactar con su aliado natural, el fortalecido Partido Liberal (FDP), al que las encuestas dan entre el 13 y 18% de apoyos. Los Verdes y los ex comunistas de La Izquierda se repartirían cada uno el 10%.
No hay comentarios:
Publicar un comentario