EXCELSIOR
PRD, una propuesta de izquierda para la izquierda
Jesús Ortega Martínez
24-Feb-2009
En una entrevista para el periódico español El País, Roberto Mangabeira Unger, ministro de Asuntos Estratégicos de Brasil, aseguró que actualmente existen tres tipos de izquierda en el mundo: la vendida, la recalcitrante y la propositiva; sólo con esta última puede identificarse al PRD.
Mangabeira (mejor conocido por su crítica inteligente a la izquierda y haber sido profesor en Harvard del actual presidente de Estados Unidos, Barack Obama), explicó que la primera “acepta el mercado y la globalización en sus formas actuales y quiere simplemente humanizarlas por medio de políticas sociales”.
La recalcitrante, señaló, únicamente “quiere desacelerar el progreso de los mercados y la globalización en defensa de su base histórica tradicional, los trabajadores sindicados de grandes empresas industriales”.
La tercera, la que le interesa estudiar al ministro de Asuntos Estratégicos, es aquella que “quiere construir el mercado y reorientar la globalización con un conjunto de innovaciones institucionales”.
También la entiende como “una propuesta de la izquierda para la izquierda”, porque su ambición “no es humanizar la sociedad, sino divinizar la humanidad. El objetivo es elevar la vida común de las personas comunes al plano más alto”.
En el PRD nos identificamos con la izquierda propositiva, y así puede constatarse en las propuestas que durante años hemos hecho y que en estos momentos ayudarían a rescatar a México de la crisis financiera, social y política en que se encuentra.
Estamos convencidos de que es necesario construir una nueva política económica, la cual esté orientada a modificar la organización productiva y distributiva del país para lograr bienestar y equidad en toda la población.
Por eso hemos planteado sustituir progresivamente el actual modelo económico basado en la especulación financiera y en la exportación por uno que se sustente en la producción e inversión en bienes, servicios, educación y conocimiento, lo cual fortalecería el mercado interno.
En este sentido, dentro de las páginas del mismo diario español, Amartya Sen, pensador de la India y premio Nobel de Economía, afirmó hace unas semanas que ante la crisis económica mundial “se requiere una buena alianza entre Estado y mercado” porque no se puede depender exclusivamente de ninguno.
Así también lo vemos en el Partido de la Revolución Democrática, por eso hemos propuesto que el Estado mexicano utilice todos los instrumentos que estén a su alcance para promover e inducir una nueva forma de cooperación entre actores políticos, económicos y sociales.
Asimismo, hemos señalado la urgencia de recuperar y actualizar la política industrial a fin de que el gobierno cuente con instrumentos eficaces, como la banca de desarrollo, para darle consistencia y racionalidad a las acciones de tipo financiero que tome ante la crisis.
Según Amartya Sen, una de las causas más graves por las que el mundo se encuentra en crisis, es que “durante años se eliminaron mecanismos de control que hubieran limitado la creación de activos tóxicos como los que han arruinado el sistema bancario”.
En el PRD pensamos que ya es momento de revertir esta situación, y las propuestas que planteamos en nuestro Plan Alternativo para la Recuperación Económica pueden convertirse en el inicio de un nuevo rumbo financiero para México, donde las responsabilidades recaigan en mercado y Estado, y éstos se dividan en un crecimiento económico, pero con el indispensable bienestar social.
PRD, una propuesta de izquierda para la izquierda
Jesús Ortega Martínez
24-Feb-2009
En una entrevista para el periódico español El País, Roberto Mangabeira Unger, ministro de Asuntos Estratégicos de Brasil, aseguró que actualmente existen tres tipos de izquierda en el mundo: la vendida, la recalcitrante y la propositiva; sólo con esta última puede identificarse al PRD.
Mangabeira (mejor conocido por su crítica inteligente a la izquierda y haber sido profesor en Harvard del actual presidente de Estados Unidos, Barack Obama), explicó que la primera “acepta el mercado y la globalización en sus formas actuales y quiere simplemente humanizarlas por medio de políticas sociales”.
La recalcitrante, señaló, únicamente “quiere desacelerar el progreso de los mercados y la globalización en defensa de su base histórica tradicional, los trabajadores sindicados de grandes empresas industriales”.
La tercera, la que le interesa estudiar al ministro de Asuntos Estratégicos, es aquella que “quiere construir el mercado y reorientar la globalización con un conjunto de innovaciones institucionales”.
También la entiende como “una propuesta de la izquierda para la izquierda”, porque su ambición “no es humanizar la sociedad, sino divinizar la humanidad. El objetivo es elevar la vida común de las personas comunes al plano más alto”.
En el PRD nos identificamos con la izquierda propositiva, y así puede constatarse en las propuestas que durante años hemos hecho y que en estos momentos ayudarían a rescatar a México de la crisis financiera, social y política en que se encuentra.
Estamos convencidos de que es necesario construir una nueva política económica, la cual esté orientada a modificar la organización productiva y distributiva del país para lograr bienestar y equidad en toda la población.
Por eso hemos planteado sustituir progresivamente el actual modelo económico basado en la especulación financiera y en la exportación por uno que se sustente en la producción e inversión en bienes, servicios, educación y conocimiento, lo cual fortalecería el mercado interno.
En este sentido, dentro de las páginas del mismo diario español, Amartya Sen, pensador de la India y premio Nobel de Economía, afirmó hace unas semanas que ante la crisis económica mundial “se requiere una buena alianza entre Estado y mercado” porque no se puede depender exclusivamente de ninguno.
Así también lo vemos en el Partido de la Revolución Democrática, por eso hemos propuesto que el Estado mexicano utilice todos los instrumentos que estén a su alcance para promover e inducir una nueva forma de cooperación entre actores políticos, económicos y sociales.
Asimismo, hemos señalado la urgencia de recuperar y actualizar la política industrial a fin de que el gobierno cuente con instrumentos eficaces, como la banca de desarrollo, para darle consistencia y racionalidad a las acciones de tipo financiero que tome ante la crisis.
Según Amartya Sen, una de las causas más graves por las que el mundo se encuentra en crisis, es que “durante años se eliminaron mecanismos de control que hubieran limitado la creación de activos tóxicos como los que han arruinado el sistema bancario”.
En el PRD pensamos que ya es momento de revertir esta situación, y las propuestas que planteamos en nuestro Plan Alternativo para la Recuperación Económica pueden convertirse en el inicio de un nuevo rumbo financiero para México, donde las responsabilidades recaigan en mercado y Estado, y éstos se dividan en un crecimiento económico, pero con el indispensable bienestar social.
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